Obituarios de un no-país — video a Alejandro Aguilar

jueves, 11 de diciembre de 2008

TREN DE LOS LLANOS CARRETERA ORTIZ-CALABOZO

Eduardo López Sandoval*



Al realizar una investigación para intentar ubicar el sitio actual del fundo El Caimán o La Guadalupe. (que es el lugar donde nada más y nada menos nació el llanero como etnia, cuestión que trataremos en entregas por venir), nos encontramos con importante información que es de capital importancia en estos momentos de la construcción del tren que une a Calabozo y Ortiz.

Los momentos primeros de esta carretera, que une estos anchos espacios llaneros que van de Calabozo y Ortiz, es descrito así por LA MISIÓN ITURBE A LOS LLANOS DEL GUÁRICO, que en un informe que hacen de la excursión medico-científica que realizaron en mayo de 1927 dicen: “Muy avanzado el medio día abandonamos a Ortiz para de allí a poco, en “Los Dos Caminos”, equivocar el nuestro, tomando por la abandonada vía que conduce a Calabozo, vía del Rastro y perdiendo las ventajas de la magnifica carretera de los Llanos, (…)”.

Narraremos las vicisitudes del paso de los primeros vehículos de motor por esta frontera de los Llanos colombovenezolanos. La “magnifica carretera de los Llanos”, como textualmente lo dice el Informe Iturbe, era pasando por El Sombrero. Sin embargo, la Comisión médica, por equivocar el camino, siguieron por la orientación por donde es hoy la carretera que une a Dos Caminos con Calabozo, que es exactamente por donde se construye el tren, por donde no había vía, menos para vehículos con motor. Pero antes, antes de que existieran carreteras y carros, por este camino de caballos y mulas, habían transitado el Obispo Mariano Martí y el sabio Humboldt. También pasaron, y narraron sus viajes, Ramón Páez y Friedrich Gestäcker, y de eso estaremos hablando en sendas entregas por estos mismos espacios impresos.

En las labores de búsqueda del sitio del Fundo El Caimán, lugar donde el sabio Humboldt registró la existencia de esta nueva etnia llamada llanero, (sitio de hato que por cierto aún no ubicamos), realizamos entrevista al Señor Coco, conocedor de la zona y habitante del poblado de Los Matafrailes. Y nos contó Coco que su abuelo, muerto hace poco octogenario, le contó que su abuela –la abuela del anciano-, le había contado a su vez, “que ella vivía en lo que es hoy el Hato La Cueva , y que allí llegaban en esa época de enfermedades muchos hombres enfermos, que ella les daba de comer y los atendía en su enfermedad en el chinchorro de un cuarto, que la mayoría moría, que quien se salvaba seguía su camino por el llano, y que cuando se morían ella los enterraba en un sitio del hato, en un cementerio creado por ella para los viajeros enfermos, que eran sin familia y sin destino, porque no iban a ninguna parte, huían de la muerte y la muerte los alcanzaba en el Hato junto a ella. Entonce la abuela de su abuelo les colocaba piedras arregladas para identificarlos si acaso algún familiar venía buscando alguno de ellos. Las piedras colocadas en flecha marcaban la tumba del indio aquel que decía que no era indio, las piedras con forma de casco recordaban al negro que llegó en un burro...”. Etcétera.

Este cementerio marcado por estas piedras, que marca un capítulo de la historia del Llano que no se ha escrito, corre el peligro de ser borrado por la construcción del tren de marras. La huella puede ser borrada.

Razones suficientes para que planteemos a los organismos oficiales a cargo de esta importante construcción, que se haga la historia de esta carretera. La historia de los nombres de los sitios. La historia de los sitios viejos dejó de ser, y la historia de los que aún es, …y por qué. Este estudio serviría para todos los extremos de la ciencia, la geografía, la antropología, la historia, la arqueología, la medicina, por ejemplo, especialmente para reafirmar nuestra identidad de llaneros. Imaginémonos, dentro de un lustro, que en un placentero viaje en tren, que cruza la sabana de palmas llaneras, y garzas y corocoras, y que el tren disminuye la velocidad, y la operadora con graciosa voz dice: “Estación Fundo El Caimán”.

El Caimán es el fundo pecuario que el Obispo Mariano Martí visitó en su afamada visita pastoral del siglo XVIII y está ubicado en mitad del camino de Ortiz a Calabozo, que fue el lugar donde Humboldt, veinte años después lo ubica como el lugar donde nació el lanero como etnia.

Humboldt hace una descripción del llanero que resultó ser la partida de nacimiento de esta nueva etnia para el mundo: “El ganado, toros, caballos y mulos, (…): vagan libremente en una extensión de varias leguas cuadradas. No hay cercas en ninguna parte. Hombres desnudos hasta la cintura y armados con una lanza recorren las sabanas para ojear los animales, recoger los que se alejan demasiado de los pastos del hato, marcar con un hierro encendido todo lo que no tiene aún la marca del propietario. Estos hombres pardos, designados con el nombre de peones llaneros, son unos libres o manumisos, otros esclavos. No hay raza más de continuo expuesta a los ardores voraces del sol de los trópicos. Se nutren con carne desecada al aire y escasamente salada. Aun sus caballos comen a veces de ella. Siempre sobre la silla, creen que no pueden hacer el menor camino a pie…”

*Abogado e historiador venezolano, Calabozo, estado Guárico, Venezuela. eduardolopezsandoval@cantv.net)

JOSÉ ANTONIO DE ARMAS CHITTY. UN GUARIQUEÑO CENTENARIO 1908-30 DE NOVIEMBRE-2008

Irma Marina Mendoza*

Durante el presente año 2008 hemos recordado el centenario del natalicio de venezolanos destacados en diferentes ámbitos del acontecer nacional, basta señalar a Miguel Otero Silva, Julio de Armas, José Antonio de Armas Chitty, Jóvito Villalba, Rómulo Betancourt, Pedro Juliac, Miguel Acosta Saignes. En nuestro querido Guárico merece especial atención la figura de un caraqueño circunstancial identificado con nuestro llano, nos referimos a JOSÉ ANTONIO DE ARMAS CHITTY nacido en Caracas el 30-11-1908, hijo de Antonio de Armas Matute y de María Justificar a ambos ladosChitty, presente en Santa María de Ipire desde los 6 años de edad y durante 21 años. De su padre, educador reconocido, recibió una esmerada educación que le permitió el desempeño de numerosos cargos en la administración pública como: director de política del estado Guárico (1938), encargado de la secretaría de gobierno del estado Monagas (1939), jefe civil del distrito Monagas (1939), jefe de la secretaria de la presidencia del estado Zulia (1941-43), Director de Publicaciones del Consejo Venezolano del Niño (1952) jefe de la secretaría del Ministerio de Educación (1969-71), entre otros.
En 1925, muy joven, escribe en periódicos regionales: Unare, El Sembrador y Unión (Zaraza), El Luchador (Ciudad Bolívar) y Letras de Moldes (Valle de la Pascua). Durante 3 lustros publicó artículos en el diario El Nacional (Caracas) e igualmente en otros periódicos venezolanos y del exterior (Lima, Buenos Aires, Madrid) Su obra hemerográfica merece ser investigada, compilada, publicada y difundida para beneficio del pueblo venezolano.
Como historiador emprendió una intensa actividad intelectual, investigó en múltiples repositorios del país: Archivo General de la Nación, Archivo Arquidiocesano de Caracas, Archivo de la Academia Nacional de la Historia, Registro Principal de Caracas, archivos públicos de distintos estados, archivos familiares y personales. Revisó Publicaciones Oficiales como: Censos de Población, Censos Agrícolas, Memorias y otras publicaciones del Ministerio de Educación. Su estadía en el Archivo General de Indias (Sevilla-España) implicó exhaustivas consultas. En 1957 es designado miembro correspondiente de la Academia Nacional de la Historia, el 10.01-1979 es electo individuo de número y se incorporó con un discurso titulado Aventura y circunstancia del llanero. Ganadería y límites del Guárico (Siglo XVIII) Combinó investigación y docencia en la Universidad Central de Venezuela, institución a la que se incorporó en el año 1949 y recibió su jubilación en 1981.
Su extensa bibliografía la resumimos a continuación: Zaraza, Biografía de un Pueblo (1949), Origen y Formación de algunos Pueblos de Venezuela (1951), Historia de la tierra de Monagas (¡955), Documentos para la historia colonial de los Andes venezolanos(1957), Tucupido, formación de un pueblo del llano (1961), Vocabulario del Hato (1961), Guayana, su tierra y su Historia (1964), Fermín Toro y su época (1966), Caracas: origen y trayectoria de una ciudad (1967), Influencia de algunas capitulaciones en la geografía de Venezuela ((1967), Vida política de Caracas en el siglo XIX (1969), La Batalla de Carabobo. Antecedentes y efectos (1971), Juan Francisco de León. Diario de uuna Insurgencia (1971), Historia de Puerto Cabello (1974), Historia de la Radiodifusión en Venezuela (1975), Boves a través de sus Biografía (1976), Historia de Paraguaná y punto Fijo(1978) El Mocho Hernández, Papeles de su Archivo (1978), Historia del Guárico (1978), Caracas habla en documentos (1979), San Miguel del Batey. Población del siglo XVII (1980), Semblanzas, testimonios y apólogos (1981). Supera la historia narrativa y descriptiva para realizar una profunda interpretación global transmitida a través de una singular y hermosa prosa. A cada obra incorpora un apéndice documental que orienta al lector y estimula el quehacer de cronista e historiadores.
J. A. de Armas Chitty se reveló como un poeta y nos legó las siguientes obras: Candil, Romances de la Tierra (1948), Tiempo de Aroma (1948), Retablo (1959), Cardumen. Relatos de tierra caliente (1952), Islas de Pueblos (1954), Canto solar a Venezuela (1967), Territorio del viento (1977). José Ramón Medina emite el siguiente juicio “Poeta de estirpe llanera, ha sabido conservar a todo lo largo de su trayectoria lírica el apego a las cosas de su tierra llegando a ser uno de nuestros más característicos cultores del nativismo, pero en otra dirección que lo distingue de tendencia popular. Cultiva la poesía con fervor verdadero. La investigación histórica le atrae con pasión profunda. Tiene una prosa recia y poética, a la vez, que le brinda singulares aciertos para el relato” (Puente de Cigarras, homenaje de la Academia Nacional de la Historia a su numerario)
Su obra escrita ha merecido múltiples reconocimientos: Premio Nacional de Romances (1945), Premio de la Revista Elite por el soneto Homenaje a Ciudad Bolívar, en el bicentenario de la ciudad (1946), Premio Casa del Guárico por el poema “Canto a la mujer y a la tierra (1947), Premio Municipal de Prosa por la obra Zaraza, Biografía de un pueblo, Concejo Municipal de Caracas (1950), Premio Nacional de Literatura por Tucupido, formación de un pueblo del llano (1962) Igualmente recibió las siguientes condecoraciones: Andrés Bello (1969 y 1976), 27 de junio (1970), Libertador (1973) y Alfonso El Sabio(1973). Nuestro personaje, autodidacta por excelencia, recibió dos Doctorados Honoris Causa en el año 1991, uno lo otorgó la UCAB-Táchira y el otro, el Alma Mater guariqueña: la UNERG.
Unas últimas palabras a su destacada personalidad. Quienes lo llegaron a conocer destacan su extraordinaria bondad, la solidaridad sin esperar recompensa, el compartir conocimientos y otros bienes. Un desprendimiento total. Estableció especial comunicación con los niños embelesados con sus conversaciones y a quienes siempre obsequió “chucherias”, juguetes En síntesis, un especial, noble y hermoso ser humano. Murió en Caracas el 6-10-1995.

*Historiadora y docente del Postgrado en Historia de Venezuela de la Universidad Rómulo Gallegos (UNERG)

Breve Semblanza de DON PEDRO DEL CORRAL Hijo Ilustre de Chaguaramas

Italo Jiménez Laya*





Ponencia presentada en el III Encuentro Extraordinario de Cronistas e Historiadores

Chaguaramas Estado Guárico 27 de Septiembre del 2008


Pedro Del Corral nace en el Municipio Chaguaramas del Estado Guárico un 27 de Abril de 1895, sus padres fueron Juan Félix del Corral y De Asunción Lima. Luego de culminar su primaria se traslada a la población de Los Teques, Estado Miranda, para proseguir sus estudios Secundarios.

Con el tiempo va a la Universidad Central de Venezuela, ingresando en la Facultad de Medicina, graduándose en ella en el año de 1921. Es de hacer notar que Pedro Del Corral fue vice-presidente de la federación de Estudiantes del año 1920.

Luego de culminar sus estudios superiores, desde el año 1921 hasta 1927, se desempeña como médico en las compañías petroleras ubicadas en el Estado Zulia. Para este mismo año Pedro Del Corral viaja a Europa logrando perfeccionarse en Medicina Tropical, en el Instituto de Hamburgo (Alemania), posteriormente va a la ciudad de Roma donde obtiene el Titulo de médico malariologo, y finalmente en Viena y Paris (Francia) se especializa en enfermedades tropicales.

En el año de 1931 retorna a Venezuela y contrae matrimonio con la hija del famoso músico Pedro Elías Gutiérrez, Laura Margarita Gutiérrez Alfaro. Se traslada a la ciudad de Maracay Estado Aragua, para encargarse de la Dirección del Laboratorio de la Clínica Maracay, iniciando una campaña antipalúdica.

En compañía del Doctor Jesús Rafael Risquez, dentro de unas series de investigaciones identifica el germen Bacteriológico Meningococo el cual es bautizado por la oficina Sanitaria Panamericana con el nombre de Venezuelensis Del Corral- Risquez. Además Don Pedro Del Corral es uno de los iniciadores en Venezuela de la “antiviruterapia”.

En el año de 1936 gana el concurso de oposición, el cargo de Jefe de Laboratorio del Hospital Vargas, siendo llamado por la Clínica Córdova de Caracas para que presentara el concurso, se mantuvo en este cargo hasta el año de 1939.

Fueron tanto sus éxitos como profesional de la medicina, que su constancia y perseverancia lo llevó a ocupar dentro de la Academia de Medicina fundada en el año de 1904, miembro correspondiente al puesto numero seis.

Es de hacer notar que este médico guariqueño en muchas oportunidades recibió el orine del Presidente de la época General Juan Vicente Gómez para realizarles estudios relacionados con la enfermedad de la Próstata, dando un diagnostico exacto y preciso, sospechando que los mismos le pertenecían a dicho General, por la fuente de envío.

Don Pedro del Corral participa en la Política de manera activa, se enfrentó al Presidente Eleazar López Contreras, fue uno de los fundadores de el Comité de Organización Política Electoral Independiente (COPEI) creándose en el año de 1946 inspirado en la doctrina demócrata -cristiana que emergía como una de las corrientes ideológicas de mayor fuerza en la Europa de la post-guerra. Sus fundadores más prominentes fueron Rafael Caldera, Lorenzo Fernández, José Antonio Pérez Díaz, Luís Herrera Campins, etc.

Del Corral fue uno de los oradores de un verbo fluído, destacándose como uno de los dirigentes prominentes para la época, aupando siempre a su movimiento político en defensa de sus principios ideológicos Social- Cristiano.

En la década de los años 70, este Cronista trato de manera personal a este dirigente, cuando por función de trabajo me correspondió pernoctar en la casa del telégrafo de la población de Chaguaramas, en donde el Telegrafista era mi paisano Antonio

Navas, Jhonny Regio el cual se desempeñaba como repartidor y hoy en día Licenciado en Educación. Don Pedro saluda y entra a la jardinería del patio interno acompañado con tres personas jóvenes, dos hombres y una mujer, diciéndoles:”…Busquen por aquí…que aquí esta enterrado mi maruto…”, el cual por mucho que buscaron, no lograron hallarlo; retirándose con la idea de volver posteriormente, ya que se dirigían a un fundo de su propiedad ubicado entre Espino y Parmana.

En este pequeño lapso de tiempo nos acercamos a este hombre eminente, donde intercambiamos palabras, dándonos cuenta de que era un hombre conversador, afable y muy amistoso.

El pueblo de Chaguaramas le ha rendido un merecido homenaje, colocando un busto en el complejo ferial de esta población en donde tiene enterrado su maruto u ombligo.

Esta breve semblanza sobre este insigne maestro, es producto de una recopilación de varias fuentes, las cuales están muy simplificadas, ya que para hablar de este personaje se requiere muchas horas, por lo extenso de su obra.

Con esta ponencia rindo un merecido homenaje a quien Honor Merece ¡DON PEDRO Del CORRAL!


*Cronista del Municipio Camaguán Edo. Guárico (Venezuela) Tlf: (0247) 7410042- (0246) 4310748 Celulares: (0414) 4657597-(0414) 4887441 Emails: italo-jimenez@hotmail.com, italojimenez_camaguan@hotmail.com