Adolfo Rodríguez*
Refiere López Castro (1994) que las festividades de Santa María de Ipire, el 2 de febrero, Día de
En su “Romance de
Hombre y rancho. Viento herido.
Modorra. Se quema el aire.
A la sombra de la angustia
La sed ahonda su cauce.
Que dejó sembrado Páez.
El lamedero calcina.
Calcinan los terronales
Cenizas dispersas flotan
Cansancio. Espejismo. Hambre.
Añadiendo en 1990 que "Cada pueblo tiene una o más lagunas en torno. En Santa María de Ipire
Y en 1981 “Venezuela es un país de risco alzado, nieve perpetua y perpetua canícula. Hay ríos que por agosto llenan el horizonte con una vitalidad sin cauce y por febrero son de arena y viento”
Territorio del Desamparo con que Arvelo Torrealba da inicios al contrapunteo de “Florentino y El Diablo”:
Puntero en la soledad
Que enlutan llamas de ayer,
Macolla de tierra errante
Le nace bajo el corcel.
Ojo ciego el lagunazo
Sin garza, junco ni grey,
Dura cuenca enterronada
Donde el casco da traspìés.
Los escuálidos espinos
Desnudan su amarillez,
Las chicharras atolondran
El cenizo anochecer.
Parece que para el mundo
La palma sin un vaivén.
El retiro de los grandes crecientes abre estos mundos donde las tortugas del género Podocnemis hacen sus desoves, mientras variedad de reptiles marcan y luchan por sus espacios, inminente la época de aparearse
Bandadas de Golondrinas de Horquilla, cada atardecer, sobrenadan restos de agua, cazando cientos de insectos en pocos metros cuadrados, mientras el Corocoro Castaño alza vuelo desde sus dormideros rumbo a los últimos charcos.
El Pato Carretero y el Alcaravancito se desplazan con sus crías a lo largo de canales y ríos de sabana. Los pichones de los primeros ya han mudado el plumaje, mientras que los de alcaravanes un plumaje inmaduro.
Patos Silbadores rondan lagunazos tardíos, junto a cientos de individuos del Barraquete Aliazul, especie migratoria del norte de América, con aleteos más rápidos que aquellos.
El Caricare Encrestado y otras aves de presa hacen sus nidos y crían sus polluelos, aprovechando que el resecamiento hace más accesible, sus piezas. Loros y guacamayas husmean ámbitos para sus nidos, preferiblemente el hueco de un árbol. Los que no nidifican pierden sus crías.
El Galápago Llanero cava hoyos en los bajíos para desovar. Mientras gaviotas y tortugas prefieren las playas.
En solicitud de pareja, Babas, con movimientos ascendentes y rígidos de cabeza y cola
Florea
Las Anacondas van de pozo en pozo.
El Roble, de imponente roja madera, blande su efímera floración de diez a quince días.
Enero y febrero abundan bagres y cachamas, coporos, zapoaras, rayas, curbinatas, doncellas. Hay salazones para la semana santa.
Tiempo del curito de laguna, corronchos o panaques en el río.
Jorge Plaz relata así su vivencia apureña:
El mes de los ardientes candelorios;
El que celebran en los vecindarios
Con gallos, carnavales y velorios.
Es el mes del trabajo en pesquería,
Del veguero en los caños y en los ríos;
Es el mes de las fieras chigïiiradas,
En lagunas, charcos y en los ríos.
El mes en que se ven salir en plazas
Terecayes que salen a poner
Por la noche; y cantan más dolientes
Las cigarras al oscurecer.
Febrero, el mes de soles ardorosos
De bravas candelas en el llano
…….
Es el mes en que ponen las gaviotas
Millares de huevos en las doradas playas;
Es el mes de flores amarillas,
Y florece también el flormorada.
Es el mes que florecen las palmeras
…………
En que cargan más los matajeyes
Y las aricas están azucaradas.
Hay parición de las iguanas. J F Martínez comenta cómo en “febrero empieza en pueblos y campos de algunas regiones del país, la matanza de inofensivas iguanas para comerles sus huevos, sancochados, que en esta época del año ya están en sazón. Las cazan con escopetas, rifle calibre veintidós, a chinazos y algunas enlazadas con guaral sujeto a la punta de una vara, después de ser adormecidas, según la creencia popular, silbándoles aires dulzones. A esas les abren el vientre, estando vivas, y luego las suelan arrastrando las tripas; crueldad que no tiene parangón. Le hizo este poema:
que en la rama florecida,
ni por estar escondida
puede esquivar a la gente.
De la astucia y el sadismo
del pertinaz cazador,
no la salva el favor
que le brinda el mimetismo.
Se le persigue con saña,
hasta viva, de su entraña
sin pensar en su dolor.
Mano perversa le arranca
la cosecha tierna y blanca.
De los frutos de su amor.
Es la chiguarada o matanza, previa a la semanasanta: llaneros a caballos los réunen en manadas y matan a machetes (Ramo y Ayarzaguena, 1983:45). Dícese que, también, para garantizar el poco pasto existente para las reses.Tiempo del mas intenso celo del venao caramerudo (Ramo y Ayarzaguena, 1983: 45)
Cabrera Malo describe una noche de luna veranera (1989): “tan clara, tan blanca que mis caballos al bracear en los hondos morichales dormidos parecían nadar más bien en un pozo de luz salpicante y tan clara y tan blanca que, al filtrarse a chorreras por entre las hojas de los palmares caía, caía sobre mí, como hubiera podido caer una lluvia sin ruido, una lluvia de primavera, lenta, dulce, blanca”
Hay monstruosos e impíos incendios, que devorando “yerbas infecundas”, mientras los gavilanes “paso a paso” asedian, “del fuego la reyerta”, “consume aún su aliento las entrañas / de los troncos vetustos; / fluye sutil fermento de las cañas / y blanda mirra llorar los arbustos”, hasta dejar sólo “flores grises y rotos arabescos”, según Lazo Martí.
Asofauna Unerg enumera concentración de fauna en los cuerpos de agua del final de la época de sequía, puesta de huevos de la tortuga Arrau y nidificación del terecay.
Por febrero es la moledera. La caña dulce, sembrada en lo alto, está a punto de papelón y hay alborozo en los trapiches, olor rancio de los bagazos, fuego ardiente bajo los calderos, guarapo e caña, melcoche, mono, papelón, y cantos de molienda, si es que aún se hace la molienda como antes: El Socorro, San Juan de Payara, quien sabe.
Hay cosecha el frijol (galleta, negro, colorao, verde, caresanto (blanco con el piquito)
Con los tres días del carnaval concluye el lapso del año en que se come carne. De donde su sentido etimológico de “carne levare” o quitar carne. Vence
Propiciatorio de la fertilidad, resulta curioso el empeño en asociar este mes con el furor si observamos que subsiste la creencia (no confimada) de que el primero nace Ezequiel Zamora. Mientras el 4 hay pronunciamientos armados en 1848, 1855 y 1992, como el día 20 (
FUENTES CONSULTADAS
-Cabrera Malo, Rafael, El Reflejo de los Remansos Azules. Caracas: Academia Venezolana de
-De Armas Chitty, J. A. Candil : Romance de la tierra / José Antonio de Armas Chitty. -- Caracas: Poligráfica Nacional, 1948. -- 101 p.
-De Armas Chitty, J. A. Cardumen: relatos de tierra caliente / J. A. De Armas Chitty. -- Caracas: Academia Nacional de
-De Armas Chitty, J. Semblanzas, testimonios y apólogos / J. A. de Armas Chitty. – Carras: Biblioteca de
-Guía Ecoturística de Miro Popic Net, revisado en http://www.miropopic.com/ecoturistica/ (enero 2009)
-LOPEZ CASTRO, Rafael. Cundanga. San Juan de los Morros: Fundación Guariqueña Para
-Martínez, José Francisco. Parajes : versos. – Caracas : Miguel Ángel García e hijo. 1975. -- 109 p.
-Ramo, Cristina y Ayarzaguena, José. Fauna Llanera: Apuntes sobre su morfología y ecología. Caracas: Cuaderno Lagoven, 1983.
-Rodríguez, Adolfo. Carne Adiós, en El Nacional, 1977.
-TORREALBA, Antonio José El Diario de un Llanero, Caracas: UCV 1987.
-INFORMANTES: José (Cheo) Rirvero, Rodrigo Rondón y Marcos Natera.
*Docente universitario, poeta e historiador venezolano (Los Teques, estado Miranda)