Arturo Álvarez D´ Armas
Algunos elementos de la parranda son:
María Ignacia, representada siempre por un hombre vestido de mujer, usa una falda ancha y larga, tela de colores al igual que la cota. Su cabeza es adornada con un sombrero de cogollo del cual penden trozos de telas multicolores y lleva además un par de moños de mecate. Ella y los demás componentes de la parranda usan alpargatas. El abdomen va abultado simulando un embarazo.
Los Tucusitos, son un par de niños que acompañan a María Ignacia. Visten trajes y gorra bicolor –amarillo y rojo-.
Los Sampedreños, representan a los esclavos, visten de levita y pumpá. El traje se complementa con pañuelos rojos o amarillos anudados al cuello. En algunos momentos del baile se ponen unas cotizas de cuero de ganado para producir un armónico sonido. Todos los parranderos se untan betún o negro humo en el rostro.
Rosa Ignacia, es una muñeca de color negro elaborada de trapo y es cargada en los brazos por María Ignacia.
Abanderado, es un sampedreño que va al inicio de la parranda con una bandera roja.
Los instrumentos musicales son cuatro y maracas, los primeros pueden ser 4 o 5 y los maraqueros entre 8 y 10 una por cada hombre y se toca con la mano derecha.
La misma está integrada por 10 personas entre las cuales tenemos a: José Gregorio Bravo, Juan Piña, Juan Antonio Paredes, Carlos Román, José Luis Loyo, Luis Alberto Bravo, José Antonio Pacheco y Antero Ortiz. Ellos no incorporan a María Ignacia, ninguno de sus integrantes desea vestirse de mujer. Usan un cuatro y varias maracas, alpargatas y un par de cotizas. Los sampedreños se ponen un chaleco negro y pañuelo rojo o amarillo. Al igual que en el valle de Pacairigua se ponen pumpá y se untan betún en la cara.
La parranda sale de la residencia de Antero Ortiz, recorren las principales calles de esa bella población carabobeña hasta llegar a la iglesia “El Salvador del Mundo”, donde es guardada su imagen.
Algunos de los cantos entonados en honor al apóstol son los siguientes:
El San Pedro de Guarenas
se ha mudado para Güigüe
y después que se mudó
se va a volver a mudar
se va pa´que Salvador
y que salvador del mundo.
En la casa donde estamos
tenemos que hacerlo bien
uno porque baila bueno
otro porque baila malo.
En la iglesia El Salvador
es que tú vas descansar
que tu tienes tu nicho
que lo acaban de arreglar.
Baila sabrosito y bueno
Y te meneas de verdad
repícame esos cueros
que yo los quiero escuchar
parece que están muy fríos
que no los oigo sonar.
Se revientan las cotizas
que yo las vuelvo a empatar
en esta vuelta y la otra
ya tú sabes lo demás.
Pégale pégale
pégale Juan.
Arara ara aralá
arara ara aralá
Yá.